El periodismo, una profesión precaria sin conciencia de clase

La precariedad laboral es el sino de la profesión o el oficio periodístico en la actualidad. Digo profesión u oficio porque depende de con quien hables así calificará este trabajo. En lo que sí hay consenso es en las lamentables condiciones de trabajo y en las paupérrimas condiciones económicas que sufren los periodistas.

A finales de 2007 la Asociación de la Prensa de Madrid y el Colegio de Periodistas de Cataluña firmaron un manifiesto en contra de la precariedad de la profesión. Como dice con acierto Juan Varela, "el problema no es una cultura empresarial y gerencial poco respetuosa con el trabajo de los periodistas. El problema es el poco respeto que muchos periodistas tienen hacia el trabajo de otros, compañeros o subordinados". Hablando en plata, son los propios directores de los medios de comunicación los culpables de las pésimas condiciones laborales de sus asalariados.

Estos días se está negociando el III Convenio de Prensa Diaria. UGT y Comisiones Obreras ya se han manifestado frente a la sede de la AED. La movilización ha pasado desapercibida para la mayoría de las redacciones, tal y como se lamenta el periodista Félix Bahón en su bitácora. Paradójicamente sí se habla, y mucho, de la huelga de los periodistas del diario francés Le Monde.